La Comisión Nacional del Agua (Conagua) inició la construcción de una planta potabilizadora para abastecer a la ciudad de Durango, pero el proyecto enfrenta un conflicto con los ejidatarios propietarios de al menos 30 hectáreas empleadas para esta obra. Hasta el momento, no han recibido la indemnización correspondiente, estimada en al menos 40 millones de pesos según avalúos realizados.
Ante la falta de pago, los ejidatarios protestan en la Presa Guadalupe Victoria y amenazaron con detener los trabajos de construcción de la potabilizadora. Denuncian que el acuerdo inicial con Conagua establecía únicamente la realización de estudios preliminares, sin autorización para comenzar a utilizar la tierra.
“Es inaceptable que arranquen un proyecto de esta magnitud sin contar con los recursos para indemnizar a quienes somos dueños de las tierras”, señalaron los manifestantes, quienes aseguran que han enfrentado múltiples retrasos en las negociaciones.
Según los ejidatarios, funcionarios de Conagua les prometieron una solución antes del pasado 15 de diciembre, pero la fecha llegó sin respuesta alguna. Por ello, decidieron alzar la voz y emprender acciones directas para que sus demandas sean atendidas.
Hasta el cierre de esta edición, no se ha emitido una postura oficial por parte de la Conagua sobre el conflicto. Mientras tanto, los ejidatarios aseguran que continuarán con sus protestas hasta recibir el pago que consideran justo por el uso de sus tierras.